El dictamen preliminar sobre el colapso en Línea 12 -que dejó 26 muertos- se centró en identificar fallas en la construcción, deficiencias en soldaduras y ausencia de pernos, pero el Gobierno de la CDMX postergó indefinidamente hablar sobre responsabilidades.
Así, por ahora, a Marcelo Ebrard, ex Jefe de Gobierno y promotor de la L12, lo dejaron sin responsabilidad.
“(Las investigaciones) son competencia de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México”, aseguró la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, tras la presentación del informe de DNV. “A nosotros nos corresponde que la Línea 12 pueda operar lo más pronto posible en condiciones de máxima seguridad”.
La firma danesa DNV entregará hasta agosto la última parte de su análisis buscando responder si el diseño de la obra fue el apropiado, si la ejecución respetó lo proyectado inicialmente y si los materiales fueron los óptimos.
Estas preguntas en buena medida fueron contestadas desde agosto del 2014, cuando la compañía francesa Systra realizó un diagnóstico completo para determinar por qué las vías se desgastaban prematuramente.
Encontró que el diseño tenía 15 curvas demasiado cerradas, los peraltes no eran los indicados y había incompatibilidad entre el material rodante (los trenes).
Además, en enero de 2015, al consultora alemana TÜV Rheinland Rail Services -también contratada por la CDMX- recomendó cambiar los convoyes arrendados a la empresa CAF, ya que son incompatibles con las vías.
The New York Times publicó que la Línea 12 estuvo marcada por las prisas para inaugurarla antes de que Ebrard concluyera su mandato en el 2012.
En el documento entregado ayer, y del que se leyeron sólo algunos capítulos, se descartaron problemas en mantenimiento y fueron señaladas principalmente irregularidades en la colocación y soldadura de pernos que unen las viguetas de acero y las losas de concreto, además de soldaduras mal ejecutadas en otras partes de la estructura.
“El incidente fue provocado por una falla estructural asociada a deficiencias en el proceso constructivo”, se dijo.
Expertos consultados por Grupo REFORMA consideraron que, a reserva de conocer el resto de los peritajes, difícilmente se podrá atribuir el colapso de la estructura a una sola causa y que se debió a la suma de varios hechos que pudieran incluir desde el diseño del trazo, hasta el exceso de peso, el exceso de vibración provocada por el desgaste de las vías o el efecto de los sismos de años recientes.
Al comentar el peritaje dado a conocer ayer estimaron que, si bien pudo haber sido determinante la mala calidad de la soldadura en una de las uniones, no lo sería tanto la colocación deficiente de pernos pues, al ir en línea recta, no hay esfuerzos laterales y la loza estaba bien apoyada.
Fuente: REFORMA