Benjamín N., quien fue declarado culpable por el asesinato de los perros Athos y Tango en Querétaro, fue sentenciado a 10.5 años de cárcel.
Además de la sentencia en la cárcel, la jueza Alicia Basurto García impuso al hombre una multa de 2.3 millones de pesos.
Del total del dinero, 2.1 millones de pesos son como reparación del daño por la muerte de Athos. En tanto, 223 mil 548 pesos por Tango; más de 12 mil 600 pesos por gastos veterinarios; más de 17 mil pesos por daños psicológicos y 50 mil pesos por daño moral.
El envenenamiento de ambos canes ocurrió en junio 2021 en Querétaro y en el juicio participaron más de 30 testigos.
Logramos una sentencia con pena privativa de libertad de diez años y seis meses y una reparación del daño ejemplar, acorde al valor que tenían los perritos, la capacitación y todos los cuidados que contaban y que le fueron proporcionados por su manejado”, declaró a medios la abogada Mónica Huerta, asesora jurídica de Edgar Martínez, entrenador y dueño de Athos y Tango.
“Una vez que sea leída la sentencia, el 30 de agosto, tiene 10 días hábiles para apelar (…) Tendría que agotar sus recursos, la ley le concede ciertos recursos, como la apelación y posterior. Si no le es favorable el fallo de esa apelación, vendría un amparo directo”, agregó Huerta.
La abogada detalló que la jueza consideró que el grado de afectación por la pérdida de ambos perros fue alta, pues no sólo se dañó al manejador de los canes, sino también a la sociedad, por la labor que realizaban, por lo que consideró que se trata de una pérdida irreparable que “ni la pena ni la cantidad económica son suficientes para reparar el daño en este caso en concreto”.
Información de López-Dóriga Digital