Por: María Mtz Schalk
Es una novela histórica escrita por Taylor Caldwell, nacida en Manchester, Inglaterra. Caldwell comenzó su carrera a los seis años, cuando ganó una medalla por un ensayo de Charles Dickens. Un año antes de inmigrar a los Estados Unidos junto con su familia.
Ha sido reconocida por muchas obras como: ‘La dinastía de la muerte’, ¡El romance de Atlantis’, ‘Columna de hierro’ y ‘Médico de cuerpos y almas’; obteniendo numerosos best-seller. El principal tema de sus novelas es la lucha entre: deseo de poder, avaricia, egoísmo, dinero y los valores familiares y espirituales.
‘Médico de cuerpos y almas’ es una novela histórica religiosa, donde se narra la vida San Lucas. El tercer Evangelista. Lucano, hijo de Iris y Eneas, esclavo liberto y gestor del archivo del gran tribuno romano Diodoro. Ambos educaron a su hijo en la creencia del “Dios desconocido”, abandonando la religión politeísta y afirmando que existe sólo un Dios verdadero para todos los hombres, no sólo para los judíos. Diodoro fue nombrado emperador de Antioquía, la actual Siria, él luchó hasta el último momento para recuperar viejos valores como el honor y la honestidad de la decadente y pervertida sociedad romana. Y sin tener una razón concreta, decidió tomar a Lucano como protegido, ya que veía mucho potencial y sentía un extraño apego hacia él.
Por lo tanto, Lucano y Rubria, hija del tribuno, estudiaron juntos desde muy temprana edad, con su tutor Cusa, relación que terminó convirtiéndose en una bonita y profunda amistad. Tras la muerte de su padre, Lucano se dedicó cada vez con más esfuerzo a estudiar, sobre todo, medicina. Y también, cada día, Lucano se enamoraba más de Rubria, un amor inocente y sincero; sin embargo, terminó cuando ella adquirió una enfermedad desconocida y falleció siendo casi una niña, dejando a Lucano en depresión total. A partir de ese momento, él maldijo al ‘Dios desconocido’, si es tan bueno como dicen, ¿por qué hace sufrir a los hombres, y más a seres inocentes que no han hecho nada malo?
Fue ahí cuando Lucano decidió irse a estudiar medicina a la Universidad de Antioquía, con el propósito de prepararse para pelear en contra de Dios y sanar a los hombres que, según él, hacía sufrir. Saliendo de Alejandría decidió rechazar todo tipo de herencia, ofertas de trabajo, incluso un ofrecimiento del mismísimo César para ser el ‘Médico Oficial de Roma’. Lucano lo único que deseaba era ayudar a los menos afortunados, a hombres y mujeres, olvidados y que sufren por alguna enfermedad. A pesar del profundo agradecimiento que sentían hacia él, esclavos, pobres y desolados, Lucano sentía un vacío en su interior que no lo dejaba ser feliz. Vivía solo, humildemente y sin familia.
Un día, después de una larga jornada, decidió regresar a Grecia, su antiguo hogar, en donde se encontró con lo que le cambiaría su visión de la vida y le daría respuesta a todas sus preguntas.
En esta novela, Caldwell nos muestra que a pesar de estar en medio de una sociedad en caos, desorden y decadente, se puede ser fiel a nuestras convicciones y valores como la bondad, para ser lo que en verdad somos: buenas personas con buenas almas. Lucano no sólo curaba el dolor del cuerpo, sino también las heridas del alma, que muchas veces son las que no nos permiten seguir nuestro camino y ser personas integras y felices. Sin embargo, existe sólo una cura para el alma: Dios.