Morelos ocupa el tercer lugar a nivel nacional en asaltos a transeúntes, una situación alarmante que se ha agravado desde el
inicio del gobierno de Cuauhtémoc Blanco en 2018.
Según datos oficiales, los delitos contra la seguridad personal han aumentado un 25 por ciento% en los últimos 4 años, dejando a la entidad en una posición crítica en materia de seguridad pública.
La ola de violencia que azota a los morelenses ha generado un clima de miedo e inseguridad, especialmente en las calles y espacios públicos.
Ciudadanos de todas las edades temen ser víctimas de un asalto al salir de sus hogares, lo que ha limitado su libertad de movimiento y calidad de vida.
Ante este panorama desolador, surge la pregunta: ¿Qué ha hecho el gobierno estatal para frenar esta ola delictiva? El gobernador Cuauhtémoc Blanco, quien prometió durante su campaña “recuperar la tranquilidad” en Morelos, parece haber fallado en cumplir con su palabra.
Ahora, con Margarita González candidata de Morena a la gubernatura, la sociedad morelense se pregunta si este es el estado que pretende
continuar con el mismo rumbo. ¿Acaso la seguridad no es una prioridad para el partido en el poder? Basta de ineptitud y corrupción.