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Hasta antes de 2018 muy poco se sabía de Marx Arriaga Navarro (Texcoco, 1981), el hoy Director de Materiales Educativos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) que impulsa la reelaboración de los libros de texto en dos semanas.

El 26 de marzo de 2012, a sus 31 años, el doctor en Filología por la Universidad Complutense fue sinodal en el examen de doctorado en Humanidades de Beatriz Gutiérrez Müller, pareja del entonces candidato del PRD a la Presidencia. Cuatro días antes del inicio de las campañas, López Obrador tuiteó que había asistido a la UAM, para atestiguar el examen y que aprobó, sin mencionar al funcionario.

Ya en 2018, en octubre 16, el nombre de Arriaga, un frecuente reseñista de la obra de Gutiérrez Müller, se mencionó a nivel nacional. Fue en la presentación de “Tepic literario. Revista mensual literaria, variedades y anuncios (1907)”, una edición facsimilar con estudio de Gutiérrez Müller. López Obrador ya era Presidente electo y por eso la presentación en la Feria del Libro del Zócalo fue reseñada en varios medios.

El 4 de diciembre de ese año, al final de un boletín de la Secretaria de Cultura, Arriaga fue nombrado Director General de Bibliotecas Públicas.

“Deseo colmar las expectativas que @BeatrizGMuller y @alefrausto han confiado”, dijo por Twitter. Gutiérrez Müller le respondió por esa misma vía: “Tu sensibilidad, tu preparación, tu inmensa cultura, tu fina elocuencia, tus premios, certificaciones y altos reconocimientos te sitúan en el lugar indicado para esa encomienda”.

Su nombramiento en la Dirección de Bibliotecas causó polémica no sólo por su cercanía a la esposa del Presidente, sino porque el investigador en la Universidad de Ciudad Juárez y ganador del Premio Estatal de Ciencia y Tecnología de Chihuahua, sin publicaciones propias, carecía de trayectoria para el cargo.

“Sólo que un pequeño grupo, que tenía el poder, tiene mucho dolor de ya no tener sus patios de recreo”, respondió Arriaga que comenzó a ganar 123 mil 297 pesos brutos mensuales, un aguinaldo de 216 mil 888 y una prima vacacional de 5 mil 954 pesos, según la Plataforma Nacional de Transparencia.

Apenas llegó al puesto, el 31 de enero desató otro escándalo con la salida de la dirección de la Biblioteca Vasconcelos de Daniel Goldin, un reconocido editor de libros que una semana antes había sido ratificado por la Secretaría de Cultura. Las versiones extraoficiales dijeron que Arriaga le pidió la renuncia: “Desocupa la dirección y bájate uno de los escritorios al sótano”, le habría dicho. Goldin no lo negó.

“En ese momento no sabía que había un sótano y el escritorio que tenía el director era muy grande para que lo moviera sólo una persona. La frase no tiene lógica”, respondió por su parte.

En julio de 2019, Arriaga presentó su proyecto para la Red Nacional de Bibliotecas. A la vez, presentó su rimbombante “Manifiesto Mexicano de Bibliotecas Públicas”: “Nunca aceptaremos una moneda que tenga la intención de limpiarle el rostro a un político para ganar votos”, añadió, y esa misma semana acusó que la compra de acervo se hacía antes con cierta carga ideológica.

“Había textos de Héctor Aguilar Camín y Enrique Krauze”, dijo sobre dos críticos del Presidente. Fue otra polémica en menos de un año.

“Resulta siniestra la vocación fascistoide de las declaraciones de Arriaga”, afirmaron los escritores, el poeta David Huerta, Premio Nacional de Ciencias y Artes y Premio FIL de Guadalajara, y Verónica Murguía, integrante del Sistema Nacional de Creadores.

Durante su gestión, la Biblioteca Vasconcelos fue rentada para grabar una narcoserie y un desfile de modas y para presentar un nuevo tequila. Por un asunto parecido en 2007 renunció el director de Bibliotecas del Gobierno de Felipe Calderón, pero Arriaga justificó su caso por el pago recibido, 311 mil 110 pesos.

En febrero pasado, con el cambio del Secretario de Educación, pasó a la Dirección de Materiales Educativos de la SEP. Se despidió acusando a los “intelectuales orgánicos”. “Estarán ansiosos por recuperar la DGB, pero el proyecto aún no termina”, expresó.

Ya en la Dirección de Materiales, el funcionario con nombre del padre del socialismo ha emprendido la reelaboración de los 18 libros de texto gratuitos de la primaria en cuya presentación citó al “Che” Guevara y pidió a los participantes evadir el sistema capitalista. El proyecto no prevé ningún pago.

En medio de su nueva polémica, en redes sociales le revivieron el “consejo” machista que le dio a las mujeres en febrero de 2020: “Mujeres: si en verdad buscan emanciparse de sus opresores, modificar este sistema machista que las rodea, lean aquellos libros”, les dijo en un acto en Actopan, Hidalgo, donde lo acompañó Gutiérrez Müller, en su calidad de Coordinación Nacional de Memoria Histórica y Cultural de México.

Ante el nuevo escándalo, no solo por la falta de pago sino por por pretender libros al vapor, Arriaga respondió que estos son momentos difíciles y que por las campañas electores no se permite hacer pagos.

El nuevo puesto que ocupa Marx Arriaga tiene un salario bruto de 137 mil 730 pesos brutos y aguinaldo de 139 mil 505 pesos netos, pero cuando fue cuestionado por quedarse con la plusvalía de los autores de los libros de texto, respondió que la satisfacción sería un pago “hermoso”.

FUENTE: REFORMA.COM

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